Ser Ministro Extraordinario de la Sagrada Comunión es un privilegio en el que su principal objetivo es llevar a Cristo a los fieles.
Este ministerio solo necesita un corazón dispuesto, constante oración y el deseo sincero de servir a Dios y a la comunidad. Si amas la Eucaristía y quieres profundizar en tu fe mientras sirves con humildad y reverencia, te invitamos a prepararte para este hermoso ministerio.
Para más información sobre las fechas de preparación y requisitos, acércate a la oficina parroquial.